La RFEF hace entrega al Atlético de Madrid de la "Copa Presidente"

La "Copa Presidente de la Federación" un torneo cuadrangular que el Atlético comenzó a disputar en 1941 y que, por circunstancias, se terminó de jugar en 1947, ya está en manos de su vencedor. La Real Federación Española de Fútbol ha hecho entrega del trofeo en un encuentro que se ha celebrado en la Ciudad del Fútbol.

Elvira Andrés, como miembro de la Comisión Gestora de la RFEF, ha entregado la Copa al director de Explotación y Operaciones del Club, Fernando Fariza, y al presidente de la Asociación de Leyendas del Atlético de Madrid, el internacional Roberto Solozábal: "Es un honor para la Federación hacer entrega al ganador de este trofeo. Os deseamos muchos éxitos con el nuevo Museo en el que esperemos esta Copa ocupe un lugar privilegiado".

El nuevo Museo del Atlético de Madrid se inaugurará este mes de agosto de 2020 en las instalaciones del estadio Wanda Metropolitano de Madrid.

La Copa Presidente de la Federación de 1941, seis años para conocer un campeón

Se trata de un trofeo que el equipo rojiblanco tardó seis años en ganar: el torneo se empezó a disputar en 1941 pero la última jornada tuvo lugar en 1947. De hecho, el equipo madrileño arrancó esa edición -1941- llamándose Atlético Aviación y acabó conquistando el torneo ya como Atlético de Madrid -1947-.

La Copa Presidente de la Federación es, por lo tanto, el primer título conquistado por los colchoneros con el nombre de “Atlético de Madrid” ya que las ligas de los años 40 las ganó como “Atlético Aviación”.

Esa copa, en un principio (1941), iba a ser un torneo cuadrangular (Torneo Ibérico) a disputar entre clubes portugueses y españoles, iniciativa que no prosperó.

Entonces nació como alternativa la “Copa del Presidente de la Federación” que jugaron el Athletic Club (entonces Atlético de Bilbao), el Barcelona, el Atlético Aviación y el Valencia. Las seis jornadas se jugaron entre abril y mayo de 1941 a falta de un solo partido, el que debían disputar valencianistas y colchoneros quienes lideraban la tabla con 7 y 6 puntos respetivamente.

Ese partido, una verdadera final -aunque en realidad era un encuentro aplazado de la primera jornada-, acabó jugándose … pero seis años y 4 meses más tarde, el 14 de septiembre de 1947.

Fue una especie de partido de pretemporada en un Metropolitano que contempló la goleada del equipo rojiblanco que se impuso 4-0 con goles de Carlos Basabe, dos, y otros dos del canario Alfonso Silva.

El entonces presidente de la RFEF, Armando Muñoz Calero, hizo entrega de la copa que llevaba el nombre del cargo que ostentaba y que ahora, en 2020, regresa a su dueño.

“Aquí acabó -recuerda el historiador Félix Martialay- ese torneo que habían olvidado hasta sus propios protagonistas. El más largo del mundo, pero también el más olvidado”.